En la entrada de hoy os voy a explicar cómo elaboramos una cajita de bombones original para entregar como recuerdo a familiares y amigos con motivo de la celebración de la Primera Comunión de nuestro Mathias.
Yo tenía claro que debíamos hacer algo nosotros mismos y durante mucho tiempo estuve buscando inspiración en internet pero no terminaba por decidirme.
Llamémoslo deformación profesional 😛 pero cuando Benoît vio en el catálogo de Artemio este minipalet, se le ocurrió que podíamos crear una caja parecida a esas en las que recibimos los artículos que después vendemos en la tienda. Mi primera reacción fue la de escepticismo (qué tendrá que ver un embalaje de mercancías con una Primera Comunión, pensé en un primer momento) pero luego acepté el reto y me puse a pensar cómo darle forma a la idea.
Ésta consistiría en colocar sobre el minipalet una cajita y qué mejor que hacerlo en color kraft para recordar un embalaje. Así que lo primero fue crear una plantilla teniendo en cuenta las dimensiones del minipalet y de los bombones que irían dentro. Éste es el proyecto con las medidas y pliegues necesarios por si queréis hacer algo parecido:
Las paredes van plegadas sobre sí mismas para darle un refuerzo extra a la caja.
Y una vez cortada:
El siguiente paso consiste en plegar y fijar la cajita, para ello utilicé la plegadora y cinta adhesiva de doble cara:
La cajita tiene el mismo formato que una caja de cerillas. La parte deslizante la hice también en color kraft pero para hacerla más original utilicé una banda de cartulina ondulada de medidas 25,5×8,5cm con pliegues a las siguientes distancias del borde: 6-9,5-16-19,5cm.
Una vez plegada y fijada con la cinta adhesiva ya está lista para acoplar a la base:
Toca colocar los bombones dentro, si es posible evitando la tentación de coger uno por aquello de asegurarse de que están muy buenos 😛
Una vez cerrada, habrá que embellecer la cajita.
En primer lugar, he añadido una cinta blanca de gros grain alrededor y la he fijado, en la base de la caja, con la cinta adhesiva de doble cara.
En la parte superior y centrándola, he colocado la etiqueta conmemorativa mediante cuadraditos adhesivos de foam para darle más resalte:
Así queda una vez fijada sobre la cajita. El diseño lo creé gracias a la combinación de varios recursos gráficos que encontré el la página gratuita de Freepik y lo imprimí en una cartulina Bazzill Crema lisa que recorté para que pudiera pasar por la impresora.
La etapa final consiste en pegarla sobre la base del minipalet para lo que utilicé la pistola de cola depositando el adhesivo sobre las dos lamas exteriores.
Pegar el minipalet sobre la caja y no al contrario, ayudó a cque quedara bien centrada.
Et voilà ¡cajita lista!
He de decir que para el resto de cajitas fue todo un trabajo en equipo: Rosa cortando y plegando, Benoît pegando las cajitas, los niños rellenándolas y servidora de nuevo haciendo el montaje final.
La verdad es que todas las personas que la recibieron encontraron que era original y les gustó mucho así que creo que lo que me pareción al principio una idea un poco rara, no lo fue tanto finalmente 😉
¡Hasta pronto!
Materiales que he utilizado